Historia
Breve historia de les Coves de Vinromà
Habría que situar en el barranco de la Valltorta, hoy declarado Patrimonio de la Humanidad, el origen del poblamiento de les Coves, a partir del 6000 a.C. De este gran conjunto del llamado «arte rupestre levantino», en una parte importante ubicado al término municipal de les Coves de Vinromà, hay que destacar las cuevas de la Saltadora, con la figura del famoso arquero
De la época del bronce, el yacimiento más importante es el de la Cueva del Mas d'Abad, donde se han encontrado soterramientos humanos y ajuares funerarios. Son numerosos los restos de poblamientos ibéricos que encontramos en el término de les Coves: el de la Morería, el de la partida del Molí Consell, de donde procede el famoso casco de plata, y el de los Tossalets, donde se encontró un fragmento de lápida; pero, sobre todo, según Francesc Esteve, "el más importando restaba en el áspero roquero de la parte vieja del pueblo".
De la dominación romana, el término de les Coves, cruzado longitudinalmente por la Vía Augusta, guarda muchos restos, entre los cuales destaca un relevo funerario hispanoromano procedente del poblado de les Fontanelles o dels Tossalets, la ocupación del cual se iniciaría en la época de Augusto, datado entre el s. II y la primera mitad del s. III.
Después de la ocupación musulmana, de la cual nada conocemos, Jaume I conquistó les Coves a la segunda mitad de agosto de 1233; por lo cual acontecerá lugar de realengo; pero el 11 de mayo de 1235, el rey donó los castillos de les Coves y de Culla al noble aragonés Balasc de Alagó. Durante poco de tiempo Don Balasc poseyó el castillo de les Coves, dado que en 1240 lo vendió, según Garcia Edo para hacer frente a sus deudas, a la Orden de Calatrava. El 2 de junio de 1275 se cedió, por permuta, el dominio del castillo de les Coves a Artal de Alagó, bisnieto de Balasc, el cual, el 11 de noviembre de 1281, otorgó a les Coves de Vinromà carta de población, aunque el documento que conocemos es una copia de 1416.
El año 1293 el rey Jaume II compró la Tenencia de les Coves a Artal por 135.000 sueldos; pero corto fue el dominio del rey, dado que el 15 de septiembre de 1294 firmaba con los templarios el cambio de la ciudad de Tortosa por los castillos de Ares, de Ollers (Tarragona), de Peñíscola y de Coves. La Orden del Temple poseyó la Tenencia de les Coves hasta el año 1312; permaneciendo en poder real hasta el año 1319, fecha en la cual el rey Jaume II la cederá a la Orden de Montesa, bajo la jurisdicción de la cual restará, de hecho, hasta la desamortización de Mendizábal (1836), y de derecho, hasta la II República (1931).
Al reinado de Pedro IV el Ceremonioso o el del puñalete (Pedro II de Valencia), la villa de les Coves participará en la guerra de la Unión (1347-1349), en contra del rey y de su señor natural, lo cual le supondrá un grave castigo de treinta y siete mil sueldos reales.
A partir del 31 de mayo de 1421, durante 42 días, las Cortes del Reino de Valencia, convocadas por la reina Maria, esposa de Alfonso V el Magnánimo, que permanecía en Italia, se reunieron en les Coves de Vinromà para recaudar un subsidio para el rey de 22.000 libras.
No debió de ser muy importante la participación de la villa de les Coves en la rebelión de las Germanías (1519-1522), dado que tan solo trece vecinos fueron represaliados.
Les Coves de Vinromà, durante la Guerra de Sucesión (1702-1713), como todo el Maestrat, fue partidaria del Archiduque Carlos; por lo cual los habitantes participaron en la defensa de Sant Mateu, asediada por las tropas de Borbón, durante los primeros días de enero de 1706. Todos conocemos las consecuencias de la victoria de Felipe V.
El ilustre botánico Antonio José Cavanilles visitó les Coves dos veces, el 26 de septiembre de 1792 y el 8 de julio de1793, y, entre otras notas, ponderó la excelente calidad del agua de las dos fuentes que están a la entrada y a la salida del pueblo. En nuestra villa, que ya contaba con unos mil ochocientos habitantes, se estaba construyendo la iglesia de la Asunción.
Durante la primera guerra carlista (1833-1840) la villa de les Coves fue asediada por los carlistas, probablemente con Ramón Cabrera al frente, los días 3, 4 y 5 de julio de 1835 y finalmente entregada por sus defensores, que eran bajo las órdenes de Baptista Vidal. La tercera guerra carlista (1872-1876) tendrá en la villa de les Coves, por su ubicación, uno de los escenarios naturales, dado que Pasqual Cucala conocía bien nuestras tierras; y además, los covarxins Pasqual Villalonga y el «Arbolero» eran sus compañeros inseparables.
El periodo comprendido entre 1890 y 1936 parece que fue, económicamente, y socialmente, muy positivo para les Coves. El año 1921 nuestro pueblo tenía 4.594 habitantes, el máximo alcanzado, y varias fábricas de adobos minerales, de jabón, de aguardiente, de tejas y baldosas. A las elecciones municipales del 12 de abril de 1931 les Coves no fue una excepción respecto del resto de España: de los doce regidores elegidos ocho eran republicanos y cuatro demócratas, ningún monárquico. Durante la Guerra Civil, les Coves quedará en zona republicana hasta el 11 de junio de 1938, cuando los soldados republicanos, después de cuarenta cinco días de ataques indiscriminados de las tropas franquistas, abandonaron el pueblo; antes había empezado un dramático éxodo hacia l'Horta de Valencia de la población covarxina. La posguerra y las grandes heladas de los años 1946 y 1956 marcarán el declive de les Coves, que a estas alturas parece recuperarse de aquella situación.
